Existe una estrecha relación entre la salud intestinal (permeabilidad, inflamación y disbiosis) y la caída del cabello. Esta conexión se explica a través de dos mecanismos principales: la malabsorción de nutrientes y la inflamación sistémica.
1. La Disbiosis Intestinal y la Malabsorción de Nutrientes
La disbiosis intestinal es un desequilibrio en la microbiota, la comunidad de microorganismos que habitan en el intestino. Un microbioma desequilibrado puede:
Afectar la absorción de nutrientes: Una microbiota poco saludable puede ser menos eficiente en la producción de vitaminas y en la absorción de minerales esenciales como el hierro, el zinc y la biotina (vitamina B7). Estos nutrientes son vitales para la formación de la queratina, la proteína principal del cabello. Su deficiencia puede debilitar los folículos pilosos y provocar una caída excesiva.
Competir por los nutrientes: Algunas bacterias dañinas pueden consumir nutrientes clave antes de que el cuerpo pueda absorberlos. Por ejemplo, estudios han relacionado ciertas bacterias con el consumo excesivo de biotina, lo que puede afectar directamente la salud capilar.
2. La Inflamación y Permeabilidad Intestinal (Intestino Permeable)
La inflamación intestinal crónica, a menudo causada por la disbiosis, puede dañar la barrera protectora del intestino, llevando al llamado síndrome del intestino permeable.
Inflamación sistémica: Cuando la barrera intestinal se debilita, partículas de alimentos no digeridos, toxinas y bacterias pueden pasar al torrente sanguíneo. Esto desencadena una respuesta inmunitaria y una inflamación que no se limita al intestino, sino que se vuelve sistémica, afectando a todo el cuerpo.
Impacto en los folículos pilosos: Esta inflamación crónica puede afectar directamente a los folículos pilosos, que son sensibles a los cambios en el cuerpo. La inflamación sistémica se ha relacionado con condiciones autoinmunes como la alopecia areata, donde el sistema inmunitario ataca por error a los folículos capilares, causando la caída del cabello en parches.
Efluvio telógeno: La inflamación y el estrés físico que acompañan a las enfermedades inflamatorias intestinales (como la enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa) pueden desencadenar el efluvio telógeno, un tipo de pérdida de cabello temporal y difusa que ocurre cuando un gran número de folículos entran prematuramente en la fase de reposo.
En resumen, la salud de tu intestino influye directamente en la salud de tu cabello. Un intestino saludable permite la correcta absorción de los nutrientes necesarios para el crecimiento capilar y ayuda a mantener la inflamación bajo control, protegiendo así a los folículos pilosos.
La caída del cabello puede deberse a una enfermedad intestinal que muchos tienen sin saberlo.
Mg. Geraldine Maurer
Nutricionista Clínica