Vinagre y Glicemia

 

Beneficios del vinagre para reducir la glicemia

El uso de vinagre de manzana o vinagre de vino para reducir los niveles de azúcar en sangre (glicemia) ha sido respaldado por varios estudios, en los que se establece que una dosis moderada de vinagre puede tener beneficios en la reducción de la glicemia postprandial (después de las comidas).

Dosis recomendada:

  • Cantidad: La dosis comúnmente recomendada es entre 1 y 2 cucharadas de vinagre (aproximadamente 15 a 30 ml) diluido en un vaso de agua (250 ml).

Momento de consumo:

  • Antes de las comidas: Para obtener los beneficios sobre la glicemia, el vinagre debe tomarse de 20 a 30 minutos antes de una comida rica en carbohidratos. Esto ayuda a reducir el pico de azúcar en sangre que puede ocurrir después de consumir carbohidratos.

  • Con las comidas: También puede tomarse mezclado con alimentos, como parte de una ensalada o aderezo, ya que el ácido acético seguirá teniendo efectos beneficiosos si se consume durante la comida.

Cómo funciona el vinagre para reducir la glicemia:

El ácido acético en el vinagre parece actuar de varias maneras:

  • Retrasa la digestión de los carbohidratos: Al ralentizar el vaciado gástrico, reduce la rapidez con la que los carbohidratos se convierten en glucosa y son absorbidos por el torrente sanguíneo.
  • Mejora la sensibilidad a la insulina: Ayuda a que las células utilicen mejor la insulina disponible, lo que resulta en un mejor control de la glicemia.

Precauciones:

  • No tomar en exceso: Más de 2 cucharadas al día puede causar irritación estomacal o daño al esmalte dental debido a la acidez del vinagre. Siempre es mejor diluirlo en agua.
  • Consultar al médico: Si tienes diabetes, estás tomando medicamentos para la glicemia o tienes problemas digestivos, consulta a tu médico antes de incorporar vinagre a tu dieta de manera regular.

Conclusión:

Tanto el vinagre de manzana como el vinagre de vino pueden ser efectivos para reducir los niveles de glicemia si se consumen de forma adecuada. La dosis recomendada es de 1 a 2 cucharadas diluidas en agua, 20 a 30 minutos antes de las comidas. Sin embargo, siempre es importante usarlo con moderación y bajo la supervisión de un profesional de salud, especialmente si se tiene alguna condición preexistente.